Cuatro formas de hacer café frío y cold brew en su casa Lo tradicional es tomarse el café caliente. Pero cuando el calor aprieta, como esperamos que sean los próximos meses en Costa Rica, nos queremos tomar algo frío. Por estas tierras, la gente asocia café frío con una bebida preparada básicamente con un espresso, helado, mucho hielo, y todo a la licuadora. El resultado: un “frappé” o batido al que se le adorna con salsa de chocolate o caramelo, galletas, chantilly… Bomba azucarada. De cuando en cuando, ese pecado es viable y delicioso. Pero existen otras formas de tomar el café frío para quienes gustan de no perder el sabor original del café. Eso sí, no todas las cafeterías las ofrecen. Así que, me propuse realizar tanto la bebida estilo “frappé”, como 2 formas que tengo disponibles en la casa para hacer café frío. Les comparto mis experimentos cafeteros y les reto a que ustedes puedan preparar y degustar. Café frappé Existen cientos de combinaciones con las que podemos hacer un café frío con esta forma. Lo que ocupamos para 1 porción básicamente es: Un espresso (o dos). Helado (lo más básico es de sabor vainilla). Cubos de hielo. Licuadora. Si no tienen una máquina de espresso, tendrían que preparar una o 2 onzas de café bien fuerte, bien cargado. Todos los ingredientes se combinan en la licuadora de manera que los cubos de hielo queden todos picados finamente (se necesita una licuadora fuerte para que nos quede el efecto frappé). Luego se puede decorar con chantilly, chocolate. Esta es la base, a partir de ahí vendrá la creatividad para combinar ingredientes como galletas, licores, siropes, frutas, miel, la lista es larga. Iced Coffee o café helado Ahora vamos a probar el sabor del café sin muchos aditivos. Esta forma de prepararlo y la siguiente, he visto que en otras latitudes como Estados Unidos sí son parte del menú de las cafeterías, sobre todo en verano. El Iced Coffee lo podemos hacer con varios de los métodos de infusión manual que ya conocemos. Se trata de filtrar nuestro café con agua caliente pero en el recipiente vamos a colocar parte del agua en forma de hielo. ¿Qué necesitamos? Un método de infusión: V60, chemex, por ejemplo. Un recipiente resistente. Unos 200 gramos de hielo. De 25 a 30 gramos de café molido un poco más fino. 300 gramos de agua no hirviendo, sino un poco por debajo del punto de hervor. La idea es que la infusión de este cafecito sea lenta. Le ponemos más café del acostumbrado para que el sabor sea más intenso. La receta que recomiendo es del Barista Kim en su libro “Al grano”. Yo usé un café lavado de la región Tarrazú. Lo filtré en mi V60. El resultado fue un café chispeante, con un post gusto típico de la acidez del Tarrazú. Cold brew o infusión fría Esta fue la forma que más me entusiasmó y dio origen a este post. Como les conté hace una semana, estuve en la Feria del Café en Frailes. Allí conversé un ratito con el productor de Tarrazú, Víctor Garro, terminé comprándole un café geisha que había secado con el proceso natural. Fue entonces cuando me dijo: “Vea, le recomiendo que haga este café en cold brew”. El “cold brew” lo había probado también tierras norteamericanas, es una bebida muy agradable, dulce, refrescante. Con ese gusanillo llegué a la casa y me puse manos a la obra. ¿Qué se necesita? Unos 50 gramos de café en molienda media a gruesa. 1/2 litro de agua fría. 1 recipiente con tapa. Facilito: es colocar el café primero y luego agregar el agua fría. Se revuelve. Se tapa y lo ponemos en un lugar fresco a macerar por unas 15 horas. Yo lo hice en la noche por ejemplo, y lo dejé ahí quedito hasta la 1pm del día siguiente. Esa noche, un olor frutoso a café inundó toda la cocina de mi casa. Luego, el café se cuela. Puede ser en un colador fino, un chorreador o incluso con el método de filtro de papel que tengamos a mano. ¿El resultado? Un café super intenso pero no amargo, muy dulce. El proceso natural que le dio Víctor al café le dejó un olor y sabor como a pasas. Me lo serví con hielo solo, y también probé combinarlo con leche evaporada y el sabor me resultó familiar a un té chai. En fin, les recomiendo experimentar con este método y diferentes orígenes siempre en tueste medio. Es fácil y si lo hacemos bien, el resultado es una gran bebida que exalta y no tapa el sabor del café. Cold Drip o café por goteo Este método se los quedo debiendo 🙁 No cuento aún con una de las muchas opciones de estos aparatos. El café frío por goteo deja caer lentamente, gota a gota agua del hielo sobre el café. Según he visto, la infusión puede durar varias horas. Hay aparatos de muchos tamaños y estilos, tal vez algunos han visto uno que es muy grande, parecido a un reloj de arena o a un experimento científico. Hay otros más pequeños, como el Bruer, el Toddy o el Cold Dripper de Hario de tamaño para la casa. ¿El sabor? Parecido al del café macerado, pero con más cuerpo. ¡Nos queda pendiente hacerlo! ¿Han preparado o tomado cafés fríos? ¿Qué opinan de ello? Comparte esto:TwitterCorreo electrónicoLinkedInMe gusta esto:Me gusta Cargando... Relacionado